jueves, mayo 17, 2007

Viaje al Medievo

Ya teníamos ganas Oscariolo y yo (Fernando) de rutear unos cuantos kms, el año pasado tuvimos que suspender el viaje a Faro por la costa de Portugal, pero este año, aunque el tiempo no acompañaba, nos fuimos a visitar a nuestro buen amigo J.J.( Jose Juan ) hasta Atienza, un pueblo en el noroeste de Guadalajara.

Un viaje sin prisas, parando cada vez que apetecía una cerveza o similar. Tomando algo en Aranda, fuimos a conocer a Diego, un organizador de la concentración motera Villa de Aranda, amablemente nos indicó el camino a seguir y aprovechó para darnos un cartel y , como no, invitarnos a asistir. Llegamos en reserva, tanto motos, como moteros, y estando repostando nos sorprendió la llegada de J.J., que se disponía a salir en nuestra búsqueda porque ya tardábamos.

A partir de aquí ya os lo podéis imaginar, vuelta turística por el pueblo, Atienza, declarada Monumento Histórico-Artístico Nacional en 1962, nos sorprendió gratamente, tomamos algo, hicimos unas fotos y a cenar que estábamos mu cansaos. Al día siguiente por la mañana nos dirigimos a Sigüenza, villa que no se puede dejar de visitar si pasáis cerca, lo tiene todo, castillo, hoy Parador Nacional, es una pasada; catedral y una plaza de Ayuntamiento muy bien conservada, total, sitio turístico por antonomasia. Seguimos hasta Jadraque para ver el castillo del Cid, o al menos asi se llamaba y regresamos a Atienza donde fuimos a comer con J.J. a un restaurante que se comía muy bien, aunque había que tener mucho sentido del humor para no saltar la barra y darle dos host... al dueño del local, que tio mas gilipollas.El resto del fin de semana nos lo pasamos moteando en compañía de J.J. y disfrutando de su buen humor y buena cocina, fue un buen anfitrión, no esperábamos menos de él.

Domingo 10 de la mañana llegó la hora de regresar y de las despedidas, un abrazo y un hasta pronto y sobretodo un agradecimiento a Jose Juan por su hospitalidad, y dejamos atrás Atienza, nos quedaba una vuelta divertida, pasamos por Silos, donde Oscar creyó reconocer a gente del club Vulcan del País Vasco cuando entrabamos en el pueblo, ellos ya se iban, cerveza en la plaza mayor y un breve paseo para descansar de moto, continuamos hasta Burgos, donde comimos al pie de la catedral. El tiempo empezaba a mejorar y hacia calor en la ciudad del Cid, unas fotos, y ya decidimos que era hora de volver a casa, un ultimo café en Sahagún y un mutuo reconocimiento del buen viaje que habíamos hecho. Espero no sea el ultimo de este palo.

Algunas fotos: