FIESTA CUSTOM PALENCIA

El pasado 14 de julio, y como manda la cortesía, nos fuimos a Palencia a la 1ª fiesta Palencia Custom, para devolverles la visita que nos hicieron en nuestra fiesta de presentación.

Salimos tempranito de León Álvaro, Oscariolo, Lobo, un infiltrado (Elvis), Manoli, y yo (Halcón), para reunirnos en la intersección de la autovía de Burgos con la del Duerna con los

Tron (El Pirata y Sonia, y El Richarvolusiero y Tati) que venían de Asturias y continuar juntos hasta Palencia.
Cuando llegamos salió a recibirnos el anfitrión Pablo y nos llevó a reponer fuerzas hasta un local en donde nos encontramos con varios miembros de la A.C.I. llegados desde Madrid, Guadalajara, etc. y con Ángel (El Duque) llegado de Bilbao (o alrededores), fundador de Los Moteros No Son Buenos Custom Klan, foro motero al que pertenecemos muchos de los que asistimos a esta fiesta.

Cuando nos pusimos en marcha, éramos mas de 25 motos (todas custom) y como no podía ser de otra manera, la ruta por tierras palentinas preciosa y salpicada de paradas para refrescarnos con cerveza 0,0 y coca colas Light.

La comida exquisita y en un entorno de lo más agradable, con sorteo incluido de un tatuaje que le fue a tocar al

Pirata cuando "mi mano inocente" sacó su número.

Después de comer, excursión hasta Ampudia con visita guiada a su castillo. En este punto se despidieron Álvaro, Oscar, Ricardo y Pelvis que se volvieron para León y se mojaron bien mojaditos con una buena tormenta que tuvo a bien caerles para que no pasaran mucho calor.

No fueron los únicos, porque al resto según volvíamos a Palencia nos cayó otra de no te menees.

La organización (Pablo, Olga, José y Mario), se desvivió con nosotros hasta tal punto que fueron a buscarnos al hotel con varios coches para llevarnos a cenar a las afueras de Palencia sin que nos mojáramos (por fuera) y que a la vuelta no tuviéramos problemas con la ingesta de alcohol.

Después de cenar nos llevaron a la zona de marcha donde cada uno se iba retirando en función de su aguante. Para variar, los últimos los Trones Asturianos.
Al día siguiente nos tenían preparado un desayuno espectacular en una chocolatería abierta exclusivamente para nosotros. Desde allí salimos de nuevo de ruta por la zona del Cerrato Palentino. Hay que reconocer que los Dalton saben prepararlas a conciencia, entre otros sitios visitamos una antigua base militar abandonada y en la que un grupo de entusiastas han preparado un circuito de mimimotos, desde la que teníamos unas vistas espectaculares.

Después de varias paradas para refrescarnos, ¡vaya calor que nos hizo!, terminamos en S. Juan de Baños y desde allí de nuevo a la chocolatería reconvertida ahora en restaurante, donde después de hartarnos a raciones, nos sorprendieron con dos paellas de concurso.
Cuando terminamos de comer y después de los consabidos besos y abrazos, cada uno para su casita.
Desde Tomahawk, agradecer a Olga, Pablo, José y Mario que se acordaran de nosotros y nos invitaran a esta fiesta. Ya nos hemos quedado con la fecha y esperamos repetir el año que viene.
Salud y ruta.